Comisión pedirá a embajada argentina que explique sobre brasileños excluidos del país
La Comisión de Migraciones Internacionales y Refugiados del Congreso de Brasil (CMMIR) pedirá a la embajada argentina que explique por qué los brasileños han sido excluidos del país.
Como adelantó LPO, Argentina y Brasil están ante un inminente conflicto bilateral frente al endurecimiento del área de migraciones argentinas a la entrada de brasileños que estudian en el país.
El Gobierno endureció los controles migratorios y abrió un conflicto con Brasil
Se trata de un «falso encuadre migratorio», es decir, una persona de otro país de la región puede ingresar al país como turista sin visa pero luego de tres meses y si desarrolla labores económicos y estudios en las universidades requieren de un permiso permanente.
En Brasil hay preocupación porque detectaron a muchos brasileños se les ha prohibido la entrada al aeropuerto bajo esa figura técnica a pesar de haber presentado los documentos necesarios y estar matriculados en universidades. Según Itamaraty (la Cancillería de Brasil), de los 90 mil brasileños que viven en Argentina, 10 mil son estudiantes universitarios.
En ese marco, el presidente de la comisión, el diputado Túlio Gadêlha afirmó que el criterio del «falso encuadre» es relativo, además de «retomar una idea dictatorial de los años 1980 y puede apuntar específicamente a alguien de una determinada nacionalidad».
Gadelha detalló que «esta restricción viola la propia Ley de Migraciones de Argentina y también el acuerdo del Mercosur, firmado en 2002, que contribuye al movimiento y estancia de residentes en países asociados».
«Nos comunicaremos con Itamaraty para que luego también se contacte con la embajada argentina, para que tengamos respuestas y se puedan generar soluciones urgentes a este impasse», agregó.
La semana pasada, la vicecanciller de Brasil María Laura Da Rocha y el vicecanciller argentino Leopoldo Sahores se reunieron en el Palacio San Martín para evitar una escalada y poner paños fríos. Eso decidieron comunicar en conjunto y Da Rocha aclaró que no sienten que haya una persecución a los 39 estudiantes brasileños rechazados.
Sin embargo, la tensión está latente. La diplomacia brasileña quiere evitar que la crisis escale pero desde el gobierno y sus aliados en el Congreso empezaron a ejercer presión para que la Cancillería de Brasil tenga una actitud más activa.