Tras el escándalo por el salariazo exprés de los senadores, el peronismo volvió sobre sus pasos y ahora pide una sesión especial para tratar un proyecto de ley que pone un tope a los sueldos de los funcionarios de los tres poderes del Estado.
Se trata de una iniciativa que fue presentada en marzo por José Mayans y que según dicen en el peronismo tenía el respaldo de todos los bloques.
El texto fija los salarios del Presidente, el vicepresidente, senadores y diputados naciones, jueces de la Corte Suprema, Procurador General, Defensor General, ministros, secretarios, consejeros de la Magistratura y diplomáticos. También menciona a directores del Estado en empresas, funcionarios de AFIP, del Banco Central, de la Justicia y del Ministerio Público.
El proyecto de Mayans establece que el Presidente de la Nación no podrá cobrar más de 20 salarios mínimos, vitales y móviles. Actualmente, el SMVM está fijado en $202.800, por lo que Milei podría percibir hasta $4.056.000. Se trata de una cifra similar a la que recibe actualmente.
Para el caso de los jueces de la Corte, el vicepresidente, senadores, diputados, Procurador General y Defensor General, el tope es de 15 salarios mínimos, equivalente a $3.042.000.
El tope para los ministros es de 12 SMVyM, para los secretarios de 10 y directores de las empresas estatales de 9.
Las remuneraciones del resto de las autoridades jerárquicas no podrán superar en ningún caso los 9 salarios mínimos por todo concepto, informaron desde el bloque peronista. De todos modos, en el texto del proyecto presentado por Mayans se habla de un tope de 15 salarios.
El avance del peronismo con este proyecto es una reacción a las críticas por el salariazo de los senadores, que cobrarán en algunos casos hasta casi 7 millones de pesos.
Los sueldos de los altos funcionarios están congelados por decisión de Milei, que en febrero desenganchó los salarios de los de los empleados públicos y ordenó dar marcha atrás con una suba del 48%. Esa decisión fue replicada en el Senado y Diputados, por lo que las dietas quedaron por debajo de los 2 millones.