“Es un punto histórico e icónico de la ciudad, un punto de referencia ¿Quién no ha dicho vamos a comer un chori en la Torre Eiffel?”, dijo y contó que “fue retirada por un pedido de la Alianza Francesa para poder hacerle mantenimiento, ya que la base estaba deteriorada”.

Sobre el puesto de choripanes que se ubica en la intersección de las avenidas Alberdi y Marconi, en el mismo lugar que la escultura, marcó que “es contradictorio que se use de ropero, de depósito o baño, eso da pena. Tenemos que cuidar el espacio y el entorno”.

“No juzgo el emprendimiento, por el contrario, lo aliento a que siga, pero creo que el dueño también tiene que comprometerse a cuidar la escultura. Hay que convivir y ser tolerantes”, expresó.

“Ahora tenemos que trabajar con la Alianza Francesa, pero tal vez lo vamos a hacer luego de la Bienal, ya que nuestro evento provincial nos demanda mucho tiempo”, estimó.

 

Fuente: Radio Libertad