Fuentes cercanas a la familia de las víctimas confirmaron a TN que Nicolás, de 12 años, se encuentra en buen estado y “está internado en observación” pero fuera de peligro.
Según trascendió, el menor fue quien pudo dar aviso a su padre de lo ocurrido y este llegó de inmediato al lugar. La familia volvía hacia la Ciudad de Buenos Aires.
El brutal accidente ocurrió durante la noche de domingo en la autopista Panamericana y dos personas murieron en el acto. Se trata de Sol Quirno, la mujer que manejaba el auto que quedó aplastado por el contenedor de un camión, y su hija Camila, quien viajaba en el asiento de atrás. Nicolás, el mayor de los dos hijos, logró sobrevivir al impacto.
El fiscal del caso, Gastón Larramendi, sostuvo que hasta el momento lograron establecer una posible causa del dramático suceso gracias a la declaración de los testigos. “Fue una larga jornada porque se trató de un hecho confuso al principio”, explicó.
“Fue un Peugeot 206 que chocó contra el camión, que pierde el control y va desde el carril lento al rápido donde impacta contra el Toyota Corolla. A raíz de la maniobra, para contener la carga, se quebró el brazo izquierdo”, detalló.
Además, el fiscal indicó que la parte trasera del camión se perdió por el movimiento brusco que hizo el conductor. Luego chocó contra el guardarrail, se desprendió y cayó encima de otro auto Toyota Corolla. “De este vehículo resultaron las dos personas fallecidas: una mamá de 44 años y su hija de 10. Un nene de 12 que iba en el asiento trasero sobrevivió”, explicó Larramendi.
“Se están recabando las cámaras de seguridad de la zona. El chofer del camión está bien, fuera del peligro y durante la noche dio testimonio”, destacó y solicitó: “Aunque, en principio, ya tendríamos cómo ocurrió el hecho, todo puede variar y por eso pedimos que los testigos se sigan acercando a las comisarías”.