El tradicional festival de la canción Eurovisión quedó empañado por las protestas contra la guerra en Gaza. En medio de manifestaciones de activistas propalestinos fuera del Malmo Arena, en Suecia, donde se desarrolla el certamen, la presentación de la cantante israelí Eden Golan dividió al público entre aplausos y abucheos.
La joven cantante, de 20 años, logró avanzar a la final del popular concurso europeo y volverá a cantar este sábado.
Fuera del teatro de la ciudad de Malmo, miles de manifestantes protestaron contra la participación de Israel en Eurovisión a causa de la guerra de Gaza. Unas 5000 personas, entre ellas la activista climática Greta Thunberg, enarbolaron banderas palestinas y pancartas que criticaban a la Unión Europea de Radiodifusión (UER), que organiza el certamen. ”La UER legitima el genocidio”, denunciaron.
Cómo fue la presentación de la representante israelí en Eurovisión
El camino de Golan a Eurovisión no ha sido fácil. La UER rechazó la canción elegida “October Rain” porque su letra aludía al ataque de Hamas a Israel el 7 de octubre. La letra debió ser cambiada dos veces hasta ser aceptada. El tema pasó a llamarse “Hurricane”.
The Jerusalem Post dijo que Golan “mantuvo la cabeza en alto” mientras interpretaba la canción en la segunda semifinal del 68º Festival de Eurovisión.
“Los enemigos del público parecieron darle energía y ella realizó una actuación pulida y dramática”, escribió.
Golan pasó a la final junto a los representantes de Suiza, Países Bajos, Letonia, Austria, Noruega, Grecia, Estonia, Georgia y Armenia, entre otros.
La clasificación de Israel no estuvo exenta de polémica. Durante la interpretación de su tema, Eden Golan escuchó el apoyo de muchos asistentes, pero también abucheos de otra parte del público en repulsa por la ofensiva militar que su país lleva a cabo en Gaza desde hace meses, con más de 34.900 civiles palestinos muertos.
Golan y sus bailarines también fueron abucheados en un ensayo general el miércoles.
Los ecos del conflicto en Oriente Medio han ido más allá, con el mensaje “paz” que pudo verse escrito en el brazo del cantante belga Mustii cuando se quitó su saco antes de realizar su interpretación.
“Condenamos las violaciones contra los derechos humanos y la libertad de expresión por parte de Israel”, se pudo leer además al inicio de la emisión de la televisión de su país VRT. La emisora no puso en pantalla la actuación de Golan.
A causa de la guerra contra Hamas en Gaza, numerosos artistas europeos pidieron en los últimos meses que se prohíba a Israel competir, pero la Unión Europea de Radiodifusión, el organismo que supervisa Eurovisión, rechazó esos llamados.
En medio de amenazas a la delegación israelí, el jefe de la agencia de seguridad israelí Shin Bet, Ronen Bar, viajó a Malmo para supervisar personalmente los planes de seguridad para Golan y el resto de los participantes del estado judío.