La Argentina decidió aumentar la tensión con Venezuela y, a través de la canciller Diana Mondino, elevó al fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) un pedido de detención contra Nicolás Maduro y otros líderes del gobierno bolivariano.
“Ante el agravamiento de la situación en la República Bolivariana de Venezuela a partir del 28 de julio pasado y la comisión de nuevos hechos que pueden ser considerados delitos de lesa humanidad, la República Argentina exhorta al Fiscal de la Corte Penal Internacional que solicite a la Sala de Cuestiones Preliminares el dictado de órdenes de detención contra Nicolás Maduro y otros cabecillas del régimen”, explicaron desde Cancillería a través de un comunicado.
La nota firmada por Mondino y que será presentada el lunes ante la Fiscalía de la Corte cita la “evidencia recogida en el curso de las investigaciones que lleva adelante la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (”Situation in the Bolivarian Republic of Venezuela I”) y los hechos ocurridos con posterioridad a los comicios presidenciales del 28 de julio son elementos suficientes para considerar el mérito del dictado de las mencionadas órdenes de detención”, tal como detallaron desde el Palacio San Martín.
Como ha sucedido con otras investigaciones, el fiscal de la CPI, Karim Khan, puede elevar un pedido de detención ante el máximo tribunal pero no lo puede ordenar él directamente. Funciona como una recomendación.
El pedido de la Argentina se suma al que hicieron 30 exmandatarios latinoamericanos esta semana, quienes firmaron un documento “pidiendo la captura y detención inmediata de Maduro, Diosdado Cabello y toda la cadena de mando”, dijo a EFE el expresidente colombiano Andrés Pastrana.
En julio de este año la Argentina ya había realizado un giro de política exterior cuando pidió reincorporarse a la denuncia que se tramita en la (CPI) por crímenes de lesa humanidad cometidos en el gobierno chavista entre 2014 y 2017.
La denuncia había sido presentada en 2018 en el marco de una iniciativa del Grupo de Lima -del que la Argentina formaba parte por ese entonces-, pero que en 2021 el presidente Alberto Fernández ordenó retirarse al renunciar también como miembro de este grupo de países.
La Corte Penal Internacional (CPI) es un tribunal de justicia internacional que se encarga de investigar posibles delitos cometidos por personas acusadas de cometer crímenes de genocidio, guerra, agresión o de lesa humanidad, como en el caso de las autoridades venezolanas. Es un órgano distinto a la Corte Internacional de Justicia, donde se investiga a los Estados.