Los economistas Eduardo Basualdo y Pablo Manzanelli acercaron a Cristina Kirchner un documento que plantea un abordaje novedoso para abrir un debate con el modelo de Javier Milei. Según estos economistas existen dos visiones contrapuestas respecto a los problemas centrales que afectan a la economía argentina.
Se puede plantear que la visión ortodoxa sostiene que los problemas son resultado del déficit fiscal en tanto que para una parte de la heterodoxia derivan de la restricción externa.
En este sentido es dato concreto que en apenas en el transcurso de horas Milei llamó héroes a los fugadores de divisas ante lo más selecto del círculo rojo reunido en el Llao Llao, para pasar luego a la autocelebración del superavit fiscal por cadena nacional.
Como respuesta, CIFRA, centro de investigación económica que depende del CTA junto con el departamento de Economía de Flacso elaboró un documento, que en términos de provocación, escala a dimensiones similares.
«Desde la dictadura militar, la restricción externa no está determinada por el saldo negativo de la balanza comercial como ocurría en la segunda etapa de sustitución de importaciones sino que a dicha variable se le agrega ahora la fuga de capitales locales al exterior como núcleo central de la misma», afirman Eduardo Basualdo y Pablo Manzanelli en el documento.
Para estos economistas kirchneristas los recursos fugados afectan centralmente a la formación de capital y no al consumo de los sectores de altos ingresos. «De esa forma restringen la expansión industrial, el crecimiento y el nivel de empleo. Asimismo, cercena las reservas de divisas, impulsando el notorio endeudamiento estatal para cubrir el faltante de divisas para garantizar esa fuga y el funcionamiento económico. Por otra parte, tiene un efecto negativo muy relevante en las finanzas del sector público porque en una proporción claramente mayoritaria esos recursos evaden sus obligaciones fiscales o dicho de otra impulsan el déficit fiscal», sostiene el trabajo.
Para Basualdo y Manzanelli esto es último es lo determinante: «El déficit fiscal no se origina en el enriquecimiento de la «casta» o integrantes del sistema político, como dice el relato esgrimido por el actual gobierno, sino que primordialmente proviene del núcleo central de los sectores dominantes (grupos económicos y el capital financiero), que en esta etapa impulsan como sus representantes políticos a los libertarios, lo cual habla de una situación de una tergiversación y cinismo político inédito»agrega el texto.
Desde el entorno de Cristina adelantaron a LPO que el discurso de la ex presidenta de este sábado en Quilmes podría transitar esa senda, a partir de esta disyuntiva contundente: «Fuga o Déficit».