El peronismo y la UCR voltearon en el Senado el DNU que ampliaba en 100 mil millones de pesos los fondos reservados de la SIDE, durante la madrugada de este viernes. Con 49 votos contra 11 y 2 abstenciones, la oposición impuso así una severa derrota a Santiago Caputo que contaba con esos fondos para financiar el ejército de trolls y la operación en los medios, la política y la justicia que despliega como jefe de la ofensiva de los libertarios.
La decisión del radivcal Martín Lousteau de mantenerse en el rechazo al DNU y no ceder a los argumentos extorsivos del Gobierno que llegó a vincular el «atentado vegano» a la Sociedad Rural con la necesidad de estos fondos, desarmó el intento desesperado del Gobierno por conseguir un cuarto intermedio. Antes de eso, en otra jugada fracasada buscó promover una sesión secreta.
Como informó LPO, Victoria Villarruel trató de evitarle el mal trago a la Casa Rosada e incluso se sumó a la reunión que encabezó Javier Milei este miércoles en Balcarce 50 con los senadores aliados para coordinar una estrategia parlamentaria que no le asestara este golpe al oficialismo.
El rechazo a los fondos reservados para Santiago Caputo fue tan amplio que hasta el formoseño Francisco Paoltroni votó en contra. El libertario que habló de «un secreto en la montaña» entre el asesor y el presidente se vengó así de su expulsión del bloque.
También se sumaron a esa postura Alfredo De Angeli, Guadalupe Tagliaferri y Victoria Huala, mientras que Edgardo Kueider y Carlos «Camau» Espínola cerraron filas con los libertarios. Mónica Silva, Lucila Crexell y Juan Carlos Romero, por su parte, figuraban ausentes al momento de la votación.
Al igual que con el debate del presupuesto universitario y su consecuente votación, la Vicepresidenta no pisó el recinto para no salir en la foto de la derrota. «A Victoria no le gusta perder», se le escuchó decir a un colaborador de Villarruel cuando todavía se discutían los preparativos de otra sesión con gusto amargo para Milei.
También se fueron raudamente los tres enviados de la Jefatura de Gabinete, José Rolandi, Lisandro Catalán y María Ibarzábal, cuando vieron venir la avalancha de votos en contra. «Literalmente no quedó nadie del gobierno», decía con rabia un senador aliado.
La sensación de vacío que comenzaba a expandirse en el recinto y los palcos obligó incluso al peronismo a retirar oradores de la lista, para acortar los tiempos y pasar a la votación lo antes posible. Fue el caso de la riojana Florencia López, que prescindió del uso de la palabra para alcanzar el objetivo opositor.
El encargado del cierre de los discursos fue Juan Carlos Pagotto, a quien Ezequiel Atauche le cedió la palabra para que defendiera el decreto. El riojano arrancó diciendo que hubo gobierno que usaron la AFIP para hacer inteligencia y terminó ponderando los servicios de inteligencia de Cuba y de China: «son superiores a los nuestros», dijo.
Como sea, el saldo de la votación es un duro golpe para Milei, que se puso al frente de la estrategia para evitar la derogación del DNU pero fracasó.