Javier Milei salió a cruzar a los gobernadores y a la oposición en medio de la negociación por la ley ómnibus y dijo que no le importa si no se la aprueban.
El presidente salió a despotricar otra vez contra los gobernadores en el programa de Alejandro Fantino en Neura, en el que habló durante dos horas y media, el mismo día en que sus ministros recibieron a los bloques que necesita para que le aprueben la ley.
«No me importa si se me cae el pacto de mayo, si no me aprueban la Ley Bases. Si quieren confrontar, va a haber confrontación», amenazó Milei.
Cuando Fantino le preguntó cómo reaccionaría si los gobernadores le boicotean el pacto de mayo, el presidente lo relativizó. «No me importa, te veo la cara en las elecciones de 2025. En principio te está yendo bastante mal: estoy haciendo el ajuste más grande de la historia, mi popularidad aumenta y la tasa de inflación sigue bajando», dijo, simulando un diálogo con un gobernador.
En medio de la pirotecnia de Milei, Guillermo Francos y Nicolás Posse se comprometieron a incorporar las modificaciones que este lunes le acercaron los bloques de Miguel Pichetto y el radicalismo para el borrador que se pondría en consideración cuando arranque de nuevo la discusión sobre la ley ómnibus recortada.
Aunque el debate iniciaría en el mismo plenario de comisiones del verano y se abriría con una versión de 180 artículos del proyecto original, tanto un diputado de Hacemos como una fuente de la UCR dijeron a LPO que se votará un dictamen a partir del borrador que hasta este lunes circuló entre los aliados y el Poder Ejecutivo.
De hecho, Pichetto se fue conforme de la reunión que mantuvo en la Rosada con Posse, Francos y el asesor Santiago Caputo. Acompañado por sus colegas Nicolás Massot, Emilio Monzó, Ricardo López Murphy, Florencio Randazzo y Margarita Stolbizer, el rionegrino admitió al término del encuentro que «fue positivo».
A pesar de la esperanza de los opositores amigables, en los pasillos del Congreso un diputado libertario reconoció ante LPO que «Ganancias no está acordada con los gobernadores ni con algunos empresarios y entidades gremiales». «No sé si va a venir en el mismo paquete de ley de bases, hay una gran diferencia y no sé si vamos a poder cerrarlo», confesó, y añadió: «no creo que lo cierre esta semana, estamos lejos todavía para poder discutirla».
Uno de los legisladores de Pichetto reconoció que «el borrador» de la nueva versión es el material que circula desde hace un mes y aclaró que la intención del gobierno es «presentar la semana que viene 180 artículos de la ley original». Ante la consulta sobre la posibilidad de que se produzcan los mismos rechazos que en febrero pasado, la respuesta ofrecida fue que el expediente conseguirá «una aprobación holgada en la votación en general» y, cuando se traten los artículos en particular, no naufragaría porque el Poder Ejecutivo «ya aprendió que se puede quedar sin nada».
En ese sentido, uno de los miembros de la bancada que participó de la reunión le dijo a LPO que «confía» que el oficialismo «va a aceptar los cambios que se propongan» durante el tratamiento en el plenario de comisiones. «Están más permeables», sostuvo, y agregó que el debate «va a ser más corto: solo dos días de discusión en comisión porque no vamos a hacer desfilar a funcionarios para que expliquen el proyecto».
El optimismo que dejó trascender el bloque contrasta con los indicios que viene recogiendo este medio, como la dureza con que el gobierno exige que primero se vote la ley ómnibus y después se tramiten los pedidos de gobernadores y legisladores opositores sobre Ganancias.
En la reunión estuvo el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, que el domingo había dicho que la restitución del Impuesto a las Ganancias «irá en otra etapa» y no estará atada al debate de la recortada Ley Ómnibus. Esto fue rechazado este lunes por los diputados amigables.
«Yo creo que van a entrar dentro de la ley la reforma laboral y el impuesto a las ganancias», dijo uno de los pichettistas.
Después de recibir al bloque de Pichetto, ingresaron al Salón de las Provincias los diputados radicales Julio Cobos, Carla Carrizo, Lisandro Nieri, Karina Banfi, Soledad Carrizo, Pablo Cervi y Pamela Verasay, además del secretario parlamentario del bloque radical, Alejandro Cacace. Según testigos del encuentro, a esa segunda reunión no habría asistido Caputo.
La síntesis que ofreció el radicalismo sobre lo conversado con los funcionarios difiere en algunos aspectos de lo que se charló con el pichettismo. A la UCR, Posse y Francos les aseguraron que el proyecto de Ganancias se dictaminará al mismo tiempo que la ley ómnibus pero por separado, y que se establecerá una alícuota de 5 por ciento para aquellos trabajadores que acrediten salarios que superen los 1,8 millones de pesos. «Se verá», complementó con algo de incredulidad un experimentado legislador de Hacemos.
En la bancada de Rodrigo De Loredo también presumen que el gobierno saldrá airoso de su revancha con la ley ómnibus. «Para la aprobación en general es obvio que ya tendríamos 32 votos a favor y la discusión se dará para la votación en particular, pero teniendo en cuenta que se achicó la ley se supone que debería ser distinto el resultado», admitió una voz del radicalismo.