Ketilly Soares de Souza, una mujer brasileña de 33 años, fue asesinada de 10 puñaladas en su casa de la ciudad de Rio Branco. Por el crimen, los policías buscaban a su novio, Simey Menezes Costa, que está prófugo.
Según fuentes de la investigación, la pareja se había mudado hace aproximadamente un mes. El domingo por la mañana, los familiares de la mujer no lograron contactarse con ella y entonces la buscaron en la casa.
Al ingresar, encontrar el cuerpo de Ketilly estaba tendido en el piso del living, en medio de un charco de sangre. Llamaron a una ambulancia que solo pudo constatar la muerte de la mujer. La policía encontró el arma homicida, un cuchillo de pesca, en el patio.
El caso es investigado por la Comisaría Especializada de Atención a la Mujer (Deam). El coordinador interino, Pedro Paulo Buzolin, reveló que Ketilly fue asesinada con más de 10 puñaladas y que había señales de forcejeo dentro de la casa.
La hipótesis de la investigación es el femicidio y el principal sospechoso es el novio de la víctima. “Por la cantidad de heridas, se trató de un delito motivado por algún sentimiento de ira. Hay que esperar el examen forense, pero, según las imágenes, supera las 10 puñaladas.”, concluyó Buzolin.
Según el sitio g1, Simey Menezes Costa le había hecho una propuesta de matrimonio en público una semana antes en la iglesia evangélica que frecuentaban. “¿Aceptás ser mi novia en la alegría y el dolor?”, le pidió en ese momento.
El sospechoso tenía un taller de bicicletas y forma parte de varios grupos ciclistas. Una amiga de Ketilly la describió a medios locales como “una persona que siempre estaba feliz” y estaba dedicada a su trabajo en una pastelería y a su hija, fruto de una relación anterior.
“Lo que hizo fue cruel. Ella no se lo merecía, tenía planes, sueños y siempre estuvo dedicada a todo lo que hizo. Lo único que queremos es justicia para ella”, reclamó.
Brasil registró récord de femicidios por día en 2023
El país vecino informó en promedio cuatro crímenes por motivos de género por día en 2023. Es decir, un récord de 1.463, según los datos recogidos por la ONG Foro Brasileño de Seguridad Pública (FBSP) sobre la base de registros policiales. Ese número representa un aumento de 1,6% frente a 2022.
Los datos sobre femicidios comenzaron a ser compilados en 2015, cuando una ley brasileña calificó el femicidio como la muerte de una mujer “causada por la violencia doméstica o familiar debido a su condición” de género.
En total, 10.655 mujeres fueron víctimas de este tipo de crimen entre 2015 a 2023 en ese país de 215 millones de habitantes.
“No podemos normalizar la muerte de más de 10.000 mujeres que fueron asesinadas en menos de una década por el simple hecho de ser mujeres”, lamentó Samira Bueno, directora del FBSP.